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os exámenes un reto alcanzable
Pasar un examen puede parecer muy difícil, pero con un poco de astucia puedes lograr mejores resultados!!
¿Te suena familiar estar sentado a la una de la mañana con una taza de café y una
pila de libros sobre la mesa, listos para ser devorados mientras el sueño te rinde, con
la esperanza de que te los aprendas por ósmosis? Éste es uno de los típicos ejemplos
que parecieran la única opción en época de exámenes.
¿Qué podríamos hacer para rendir mejor en los exámenes?
Hemos iniciado un nuevo semestre y estamos en la universidad porque nos interesa
aprender todo aquello que nos prepare para nuestra profesión y, más aún, para la
vida. Sin embargo, se aproximan los exámenes y con ello, la mayoría de las veces, el
agobio por la carga de trabajo, el temor por la calificación que obtendremos. Entonces,
nos olvidamos de aprender.
Valdría la pena preguntarnos ¿cómo enfrento la época de exámenes?, ¿me vuelvo
irreconocible?, ¿qué estoy haciendo para obtener mejores resultados?
Al preparar y presentar un examen intervienen diversos factores que es conveniente
considerar para obtener mejores resultados. A continuación encontrarás algunos de
ellos:
Biológico. El cuidado de la salud, la alimentación y el descanso. Hay alimentos que te
ayudan a aumentar la energía como las nueces, los cacahuates y el jugo de uva.
Psicológico. Factores como la motivación, las emociones y la personalidad influyen
en el logro del aprendizaje. Por ejemplo, el miedo y la ansiedad por los exámenes
impiden razonar, y es más difícil aprender y recordar. Ante ello es recomendable:
- Conocer la causa. Distinguir si es una situación de peligro seguro real (no traje el
trabajo y no podré presentar el examen) o bien, una sensación de temor o ansiedad
(estudié y estoy nervioso por lo que me puedan preguntar, sí repruebo estaré en
medidas académicas).
- Una vez que se distingue cuál es la causa, se puede:
- Enfrentar el miedo, al mal paso darle prisa, para que llegar tarde al examen si
de todos modos lo tengo que hacer.
- Evitar lo evitable. Por ejemplo, organizarse con anterioridad para entregar el
trabajo a tiempo.
- Ensayar las posibles preguntas y ejercitar algunas respuestas.
- Felicitarse por el esfuerzo logrado, por mínimo que parezca. (Haber hablado
con mayor seguridad en el examen oral u obtenido más aciertos que en el
examen anterior, por ejemplo). Esto, además de aumentar la autoestima, es un
motor para no rendirse ante el siguiente reto. Pon a prueba tu carácter, el
esforzarse en las pequeñas cosas te prepara para las grandes tareas.
- Encontrar motivos valiosos para seguir adelante. El encontrarle un mayor
significado a lo que se hace permite aprenderlo mejor.
Pedagógico. Factores como la manera en que se aprende (estilo de aprendizaje), los
hábitos de estudio y la organización son, entre otros, elementos que deben tomarse en
cuenta. Por eso se recomienda:
Antes del examen:
- Conocer el modo en que uno aprende mejor ayuda a facilitar el estudio (solo o en
equipo; caminando o sentado; con resúmenes, esquemas, subrayados, etc.)
- Analizar la forma en que suele hacer los exámenes el profesor para saber qué es lo
que él espera y plantear estrategias para lograrlo.
- Además del examen tener presente factores como la puntualidad, entrega de
trabajos, participación, y otros, que el profesor tomará en cuenta para evaluar el curso.
- Programar el tiempo de estudio considerando el número de materias y su grado de
dificultad, de acuerdo con la personal capacidad.
- Establecer un horario para repasar. Esto ayuda a la memoria a almacenar más
información por más tiempo.
Durante el examen
- Poner atención a las instrucciones.
- Leer todas las preguntas antes de contestarlas.
- Comenzar con las preguntas más fáciles.
- Cuidar la letra y la redacción. En caso de manejo de números cuidar el orden y
revisar los cálculos.
Ambientales. Factores externos que influyen en el estudio.
Tener presente el tipo de lugar que a cada uno le ayuda a estudiar mejor.
Favorecer la atención hacia lo que se está haciendo. Evitar todo lo que distraiga.
Conocer los factores que pueden influir para un mejor aprendizaje permite prevenirlos,
controlarlos e incluso pedir ayuda para que jueguen a nuestro favor.
Recuerda, la época de exámenes es un reto para superar los propios límites, es una
oportunidad de desarrollo personal. ¡Suerte!